Cosas Que Me Hacen Bien (Y Quizás a Ti También)

¡Hola!

Me ha costado un montón mantener a flote mi blog con la contingencia del país. En un post anterior escribí un poco sobre mi situación particular, donde también dije que si bien en un principio preferí mantener mi blog en silencio por respeto a las demandas sociales, para mi proyecto es importante seguir publicando, porque aún es muy (muy) pequeño.

Conversando con amigos y con otras personas en general, he visto que para muchos la falta de certeza y la sensación de vulnerabilidad han jugado muy en contra de su salud mental. Y si bien en mi opinión nada reemplaza a un tratamiento cuando es necesario, pensé en compartir las estrategias (casi de supervivencia) que he utilizado durante el último año y sobre todo en este último tiempo para mantener mi ansiedad a raya.

Obviamente, y como todo lo que publico en este espacio, este post está basado en mi experiencia personal. Por lo que puede (o no) funcionarte ¡Ojalá que lo haga!

‎‎‎

Mis antecedentes:

Sufro de ansiedad y tuve un trastorno alimenticio (con el que a veces todavía peleo) durante muchos años, pero actualmente no estoy ni medicada, ni voy a terapia. Mi supervivencia se basa en el auto-cuidado. Es un camino muchas veces difícil que yo misma escogí pero a pesar de las dificultades, funciona.

Yo pienso que no hay nada malo en medicarse y que muchas veces es necesario. Yo escogí no hacerlo más porque tomando pastillas no me sentía yo misma, ni emocional ni cognitivamente. Sin pastillas soy mucho más intensa, pero también me siento más yo y he aprendido a aceptar eso.

Que yo haya dejado de medicarme no significa que la puerta esté cerrada para mí en el futuro y tengo muy claro que si eventualmente se me hace necesario volver a terapia y a medicarme, lo voy a hacer.

Pero mientras pueda manejar yo solita mis complicaciones, eso es lo que voy a escoger.

En mi caso además, no es que yo haya decidido de un día para otro tirar mi tratamiento por la borda. El proceso fue bastante lento y después de aproximadamente 4 años de terapia la verdad, es que he aprendido muchísimo y ya sé cómo manejar con bastante éxito, mis propias fluctuaciones.

A estas alturas conozco distintas formas de cuidar mi salud mental y las pongo en práctica lo más que puedo.

Obviamente no en todos los casos pero creo que muchas veces nuestra incapacidad de aceptar personalidades y formas de vivir distintas nos hacen callar, o más bien diluir, aquello que no calza con la norma, que no siempre es algo patológico.

También creo que por diversos factores, entre ellos los medios, tenemos muy baja tolerancia a las emociones negativas. Creemos que tenemos que ser felices y productivos 100% del tiempo, y como somos humanos, simplemente no somos así.

Fluctuamos, cambiamos.

Enojarnos, frustrarnos, tener pena o simplemente querer descansar nos parece inmediatamente un problema, cuando muchas veces es simplemente una respuesta normal a los hechos de la vida cotidiana.

Escoger el auto-cuidado ha sido una ruta llena de baches y difícil de manejar que me ha demostrado que soy mucho más capaz de cuidarme de lo que alguna vez pensé.

Me ha enseñado a ser más autónoma, más independiente y a tener mayor tolerancia a la frustración.

Así que acá comparto lo que a través del tiempo, he considerado más útil para manejar la angustia y la ansiedad:

Tener una base: para mí la base siempre es tener buenos hábitos. Intentar comer y dormir bien y a eso sumarle ejercicio. Tener hábitos sólidos sirve muchísimo porque es el terreno sobre el que construyes el resto. En este último año he tenido varias dificultades para mantener mi “base” bajo control como antes, pero de a poquito lo estoy logrando de nuevo y también gracias eso estoy más estable que hace algunos meses..

Desconectarte: entiéndase como cualquier actividad en la que lo pases bien y te olvides por un rato de tus problemas. Desconectarte también significa cerrarle la puerta, aunque sea por unos minutos a las situaciones y personas que te dejan sin energía, que nos desgastan más de lo que nos damos cuenta a veces. Lo puedes llevar a cabo con cualquier cosa, la idea es que lo disfrutes enormemente. A mí, guitarrear, escribir, bailar, o salir caminar me sirven muchísimo.

Aterrizar: tener momentos de paz dentro de lo posible. Darte momentos para poder pensar y permitirte procesar lo que sea que te esté pasando. Es tan fácil vivir automáticamente que a veces se nos olvida permitirnos sentir. Para mí, que soy una desconectada emocional, este punto es crucial. Lo hago a través de pequeñas meditaciones o simplemente momentos de desconexión de las redes sociales. Lo que busco es ser honesta conmigo misma y reconocer mis necesidades.

Y también conectarte: tal como hay gente que te agota, también existen personas que te dejan recargada de buenas energías. Intenta rodearte de esa gente de vez en cuando. Ya sea para conversar sobre tus problemas o simplemente para pasar un buen rato, ojalá tu círculo más cercano se componga principalmente de personas así.

Reconocer tus debilidades: cuando lo anterior no basta o cuando las emociones te sobrepasen, no te olvides de que no siempre podemos hacer todo por nuestra cuenta y que a veces hay que ser capaces de pedir ayuda, de algún ser querido, o ayuda profesional. Los seres humanos vivimos en sociedad (aunque la nuestra esté en crisis ahora XD) y es por algo.

Bonus track: cuando la ansiedad sea mucha, recuerda que tu vida es tuya y tus decisiones son para ti y no para el resto. No vives para los demás, vives para ti. Es muy fácil decirlo pero convencerse a consciencia de esto no es tarea fácil. Yo en lo personal lucho contra este tipo de pensamientos recordando que estoy intentando construir una vida que me haga feliz a mí y que tomar decisiones para los demás es perder el foco.

Intentemos concentrarnos en el presente y en aquello que nos brinda satisfacción y alegría intrínsecas, más allá de complacer, sorprender o demostrarle algo a alguien.

Enfoquémonos en esas cosas que realmente le hablan a nuestras almas.



Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *